Los líderes acordaron promover la democracia y el crecimiento económico, además de gestionar conjuntamente la migración galopante en el continente, al término de una polémica Cumbre de las Américas, celebrada en Los Ángeles que puso de manifiesto, las divergencias entre Estados Unidos y la región.
Polémica por la exclusión de países
La IX Cumbre de las Américas finalizó ayer viernes en Los Ángeles con el recuerdo constante a Cuba, Venezuela y Nicaragua, ausentes por el veto del Gobierno de Joe Biden, que buscó pasar página impulsando un gran pacto migratorio.
La firma de una declaración final de consenso, que también incluye compromisos sobre el cambio climático y la preparación para las pandemias, dio a la cumbre una señal de armonía muy necesaria, después de que varios líderes, entre ellos el chileno Gabriel Boric, reiterarán el pasado viernes sus críticas a EE.UU. por excluir a Cuba, Nicaragua y Venezuela de la cumbre.
La administración del presidente estadounidense Joe Biden, que organizó la cumbre, manifestaron que los tres gobiernos son dictaduras, pero México, Argentina y otros países de la región, tienen una opinión diferente.
Ausencia de López Obrador
La decisión provocó la ausencia del presidente mexicano, Andrés López Obrador, logrando bajar las expectativas del evento.
El canciller de México, Marcelo Embrandt, en su discurso ante los líderes de la cumbre, enfatizó; «Nadie tiene derecho a excluir a otro país por ningún motivo, y mucho menos por diferencias políticas sobre su estatus político», reseña Télan digital.
La reunión política, terminó de forma decepcionante, debido a los desacuerdos entre Biden y el grupo de presidentes que menos le favorecen y los críticos de las exenciones, por la exclusión de Cuba, Nicaragua y Venezuela.
Inmigración y Protección
Los principales pilares de la iniciativa son facilitar la entrada legal de personas en los países de destino, proporcionar asistencia a las poblaciones afectadas por la migración y dar una respuesta coordinada a las emergencias humanitarias en la frontera, dijo la Casa Blanca.
Estados Unidos acogerá a 20.000 refugiados de América Latina en 2023 y 2024, tres veces más que este año, con un enfoque en los refugiados de Haití, y 314 millones de dólares para ayudar a los migrantes de la región.
Encuentros bilaterales
La cumbre sirvió de plataforma para encuentros bilaterales, como el que mantuvieron Biden y el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, quien se declaró «impresionado» por la reunión y pudo resolver las diferencias que tenía con el mandatario estadounidense.
El presidente brasileño, también dijo a sus homólogos, que su país protege el medio ambiente y los bosques y tiene la legislación más completa del mundo en esta materia, tras las críticas por la deforestación incontrolada en la Amazonia.
Las manifestaciones también reinaron en la Cumbre
La polémica por la exclusión de los Gobiernos de: Miguel Díaz-Canel, Nicolás Maduro y Daniel Ortega, tachados de antidemocráticos por Estados Unidos, llegaron con manifestaciones, durante las tres deslucidas sesiones plenarias de los jefes de Gobierno celebradas entre jueves y viernes pasado.
Los manifestantes, tambien pedían una regulación, tanto para los solicitantes de asilo, como para quienes llevan décadas en EE. UU. con permisos temporales.
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Prensa LOV/CCGuerra