No es cualquier cosa la que tienen que enfrentar Manuel Rosales y UNT en lo sucesivo. Si participamos en el proceso electoral que se avecina nos cae mediomundo encima y, si no lo hacemos, desaparecemos de la escena, dejando un espacio importante como la Gobernación del Zulia y por consiguiente dejaremos a su suerte al pueblo Zuliano que soportó en el pasado los rigores del desgobierno y abandono del chavismo.
Rosales se regresó al Zulia porque fue un imperativo de su pueblo para detener el grave deterioro causado por la marea roja que todo lo destruyó.
Fueron años terribles para el Zulia que, a pesar de todos los esfuerzos realizados por Rosales en estos tres años y con grandes limitaciones, aún la tierra del Sol amado no logra reponerse.
El sistema eléctrico colapsado; vialidad y acueductos inservibles; hospitales y módulos de salud destruidos y en completo abandono, la educación por el suelo; la inseguridad a niveles increíbles; los campos y los pueblos indígenas abandonados totalmente; ni hablar de la economía regional desmantelada provocando una diáspora nunca antes vista.
No fue un antojo de Rosales ese regreso. Fue un clamor de los zulianos, pero sobre todo, de los más humildes con quien Rosales se codea y por los que ha consagrado su carrera política desde que era un adolescente.
Desde el Municipio Colón siendo primero concejal y luego Alcalde realizando obras de envergadura hasta ser Alcalde de Maracaibo y luego Gobernador siendo hasta ahora el Gobernante que más ha repetido y el que más ha hecho por el Zulia. No por casualidad hoy después de 3 años de gestión en las encuestas está imbatible.
En el 2006 la oposición le exigió a Rosales un sacrificio, porque no fue otra cosa, enfrentar a Chávez que ostentaba todos los poderes y colosales recursos. Rosales no titubeó, sabía el costo que asumiría frente tamaña decisión.
Veníamos de no tener candidato, al punto de haber apoyado Arias Cárdenas un disfraz que luego dio la voltereta hacia sus orígenes. En ese entonces con limitados recursos y haciendo un gigantesco esfuerzo Rosales levantó casi 4,5 millones de votos y nos colocó de nuevo en la ruta electoral. Ello nos dio aliento para luego impulsar a Capriles dos veces y rematar con la victoria arrolladora en la AN del 2015.
Esa decisión le costó a Manuel el destierro por más de 4 años y a su regreso, año y medio de encarcelamiento en el Helicoide.
Chávez en el fondo le temía. Sabía que si lo dejaba avanzar más adelante lo derrotaría. Rosales no solo se enfrentó a la crueldad de un régimen despiadado sino también al escrutinio salvaje de enemigos gratuitos y sectores de la oposición que no le perdonan sus éxitos políticos tanto en el Zulia como en toda Venezuela.
Más reciente impulsó en la PUD las primarias, las defendió en Barbados porque estaban en pico e Zamuro, apoyó su resultado, apoyó a María Corina cuando esta respaldó a Corina Yoris luego de la injusta e ilegal inhabilitación de la que fue víctima.
Para salvar nuestra tarjeta de UNT se inscribió faltando pocos minutos para que no nos quedáramos sin opción para las pasadas elecciones del 28J. De inmediato, como un soldado se puso a la orden de la unidad para que incluso, escogieran a otra opción que pasara el filtro del régimen y así fue. María Corina y los radicales lo vetaron tal como lo hizo Maduro con ella.
Es decir, inhabilitaron a Rosales sembrando injustamente dudas sobre él. Rosales, sin embargo, honró su palabra una vez más y apoyó por consenso a Edmundo González candidato propuesto a última hora por María Corina y la mayoría de la PUD. A pesar de ello, todavía sus adversarios dentro de la oposición y algunos Dioses del teclado lo atacan brutalmente. Así son las cosas como decía Uslar.
Finalmente, les digo a mis compañeros de UNT, una vez más demos un voto de confianza a nuestro líder Manuel Rosales quien tiene el pulso en las manos de la actual situación política.
Tiene además todo el peso en sus hombros de las consecuencias de lo que hagamos o dejemos de hacer. También hay que decirlo, no tiene un pelo de tonto. Sabe en qué terreno se mueve, lo que arriesga y arriesgamos. Ante el dilema de participar o no en estas elecciones después de lo ocurrido el 28J el asunto no es fácil, pero no hacerlo, sería abandonarlo todo.
Tenía meses sin escribir, pero creo que hay momentos en los que las cosas hay que decirlas.
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Raúl Yusef. Ex candidato a la gobernación del estado Bolívar.