El Historiador y escritor Yldefonso Finol, fue el orador de orden en el acto de protesta anticolonialista realizado en la ciudad de Maracaibo. “El 8 de septiembre de 1529, no hubo ninguna fundación de Maracaibo ni de ciudad alguna a orillas del Lago. Fue el inicio de una invasión por el ejército europeo, al mando de Ambrosio Alfinger, enviado por el emperador Carlos V para conquistar unas tierras y despojarlas de su riqueza”.
Yldefonso Finol, historiador y escritor
Este planteamiento lo realizó este 8 de septiembre, en Santa Rosa de Agua, comunidad Añú del Zulia, en una entrevista publicada por el diputado Juan García.
Allí se concentraron cantores, cultores, pescadores y líderes de la comunidad para reafirmar que Maracaibo no fue descubierta ni fundada, porque ya existía una población, una civilización acuática, con sus palafitos y embarcaciones.
Un poco de Historia…
Relata el historiador que Ambrosio Alfinger venía de Coro, con una tropa de 180 soldados armados y comenzó una invasión militar genocida, con imposición de un régimen colonialista oprobioso, de esclavitud y saqueos de las riquezas, minerales y naturales que existían en las regiones.
Hubo una segunda invasión de Alfinger, donde recorrió el Río Macomite (Limón) y el 1º de septiembre de 1531, abandonó para siempre la región del Lago. Murió por una flecha envenenada el 31 de mayo de 1533, que recibió en el Valle de Chinácota, Colombia. A su paso sembró el terror en las comunidades indígenas del oeste de Perijá, el Magdalena Medio y el Catatumbo.
La historia que nos ocultaron de Maracaibo
Finol, quien además fue constituyente bolivariano de 1999, destaca que de la masacre contra los Añú, sobreviven unos reductos que están en El Moján, en las islas del Archipiélago, en la Laguna de Sinamaica y en Santa Rosa de Agua; porque el pueblo más grande llamado Paraute, lo quemó, el 13 de noviembre de 1939, la dictadura de López Contreras, con aval de las trasnacionales petroleras.
Estos sucesos fueron distorsionados, en la formación académica que se impartía en el país. Así lo constató Finol en las investigaciones que constantemente realiza, de las cuales publicó, el 2015 un libro, titulado “La infundada fundación de Maracaibo”, reseña que publicó en su Twitter @IldefonsoFinol.
Concluye el historiador Finol con estas interrogantes: ¿Qué documentos prueban la existencia de esa ciudad, ¿Dónde está el cabildo?, ¿Por qué el primer escudo de la ciudad colonizada y conquistada por los europeos, es de 1635?, ¿Por qué no hay edificaciones o ruinas de la ciudad de Alfinger?, ¿Por qué ese mismo imperio español envió, 40 años después, a Alonso Pacheco a fundar esta ciudad?.
La voz guerrera del pueblo Añú la asumió el profesor Heberto Ortega, maestro añú, jefe de la División Zulia del Instituto Nacional de Idiomas indígenas, quien de manera contundente expresó: “A estas tierras llegaron unos invasores que con arcabuces y espadas intentaron doblegar a las comunidades indígenas, para apoderarse de las riquezas, de las rutas marítimas y acabar con la cultura que allí existía.”
Antes estas cruentas batallas los Añú resistieron por 100 años, con hidalguía demostrando su condición de antiimperialista. Ese legado está vigente: “somos los mejores navegantes, mantenemos nuestras costumbres y todavía hay viviendas palafíticas. Seguimos como pueblos originarios en la ciudad de Maracaibo”, afirma Ortega.
Concejo Municipal realizó sesión solemne
El Concejo Municipal de Maracaibo conmemoró el 493° aniversario de la fundación de la ciudad, teniendo como orador de orden, al presidente mundial de la Cámara Junior Internacional (JCI), Argenis Ángulo, joven nacido en esta tierra.
Eduardo Vale, presidente de la Cámara municipal junto a los concejales le impusieron a Argenis Ángulo, la Orden de Maracaibo en su primera clase en reconocimiento a su trayectoria.
Durante la sesión se entregaron condecoraciones a diferentes personalidades.
En su discurso el orador destacó a Maracaibo como una ciudad que le ha dado mucho a Venezuela, y hoy es una de las más importantes del país.
Refirió que; “Es la capital del estado que mayor cantidad de petróleo ha producido en Venezuela; la cuna de Rafael Urdaneta, a quien el Libertador Simón Bolívar llamó «El Brillante». Aquí se fundó el primer banco del país (Banco de Maracaibo); se instaló el primer telégrafo, teléfono y la primera planta eléctrica de la nación; se realizó el primer trasplante de riñón y se escenificó la Batalla Naval del Lago de Maracaibo, la cual selló la Independencia de Venezuela”.
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PRENSA LOV/CCGuerra